Preston & Child se inspiran en una historia real misteriosa, desconocida y apasionante —el incidente del paso Diátlov, en el que nueve montañeros murieron en circunstancias extrañas en 1959, en la antigua Unión Soviética— para el nuevo caso de Nora Kelly en La montaña muerta . La investigación despierta un mal que llevaba mucho tiempo dormido, en un thriller que combina ritmo, ciencia forense y el peso de un pasado helado

La obra
En 2008, un grupo de nueve montañeros, estudiantes de ingeniería, no regresaron de una travesía por las montañas Manzano, en Nuevo México. El equipo de rescate localizó el último campamento y no encontró explicación a lo que allí vieron. Algo verdaderamente aterrador debió sorprenderles mientras descansaban en la tienda que los impulsó a abrirse paso a cuchilladas y huir descalzos y sin prendas de abrigo hacia una muerte segura en medio de una ventisca. De los nueve montañeros solo se recuperaron los cuerpos de seis. El caso, al que el FBI dio el nombre en clave de «Montaña muerta», nunca se resolvió. Quince años más tarde se descubren en una cueva otros dos cuerpos de la expedición perdida, uno de ellos víctima de un espantoso suicidio. La joven agente del FBI Corrie Swanson se une a la arqueóloga Nora Kelly para investigar lo que realmente sucedió en ese fatídico viaje y encontrar a la novena víctima.
Los autores
Douglas Preston y Lincoln Child son coautores de una treintena de novelas, aunque también escriben por separado. Lincoln Child es un apasionado de las motos, los loros exóticos y la literatura inglesa decimonónica. Douglas Preston, en cambio, prefiere los caballos, el buceo, el esquí y la exploración de la costa de Maine en un barco de pesca.
